2024-11-20
18 de noviembre de 2024: el gobierno chino ha anunciado un ajuste significativo en su política fiscal para elfotovoltaico (PV)industria, lo que indica un posible cambio en el enfoque del país para apoyar el desarrollo de energías renovables. Según la última actualización de la política, las tasas de reembolso de impuestos para ciertos productos y componentes fotovoltaicos se reducirán con efecto inmediato.
La decisión se produce en un momento en que China equilibra su compromiso de promover la energía renovable con sus objetivos económicos más amplios. Durante la última década, generosos reembolsos de impuestos y subsidios han impulsado un rápido crecimiento en el sector fotovoltaico, convirtiendo a China en el líder mundial en producción y exportación de energía solar. Sin embargo, expertos de la industria sugieren que el ajuste refleja la intención del gobierno de frenar el exceso de capacidad y fomentar una mayor eficiencia e innovación entre los fabricantes.
Los incentivos fiscales reducidos pueden afectar la competitividad de los productos fotovoltaicos chinos en el mercado internacional, donde el país domina actualmente con más del 70% de la cuota de mercado mundial. A nivel nacional, se espera que la política impulse a los fabricantes a centrarse en productos de alto valor y tecnologías avanzadas, alineándose con los objetivos del país de crecimiento centrado en la calidad y desarrollo de energía verde.
En respuesta, muchos actores de la industria han expresado su preocupación por los posibles impactos a corto plazo en la rentabilidad y la dinámica del mercado. Las empresas más pequeñas y menos avanzadas tecnológicamente podrían enfrentar desafíos importantes, lo que llevaría a posibles consolidaciones en el sector.
A pesar de estas preocupaciones, los analistas creen que la medida subraya la estrategia a largo plazo de China para pasar de ser el centro mundial de fabricación de energía solar a convertirse en un líder en soluciones de energía limpia sostenibles e innovadoras.
Se espera que los mercados internacionales sigan de cerca el ajuste de política, ya que puede tener efectos dominó en las cadenas de suministro y los precios de la energía fotovoltaica a nivel mundial.
China ha sido una potencia mundial en energía renovable, particularmente en la fabricación y el despliegue de energía fotovoltaica. El sector se ha beneficiado de un fuerte apoyo gubernamental a través de subsidios, incentivos fiscales y reembolsos a las exportaciones, lo que ha fomentado un crecimiento sin precedentes durante la última década. La capacidad solar instalada del país alcanzó un récord de 500 GW a mediados de 2024, lo que lo convierte en un contribuyente vital a los esfuerzos globales contra el cambio climático.
Si bien esta política marca un momento crucial, se considera parte de la estrategia en evolución de China para abordar la sostenibilidad económica y al mismo tiempo mantener su liderazgo en la transición global a las energías renovables.