2024-03-13
Con la transición global en las estructuras energéticas y la adopción generalizada de energías renovables,fotovoltaico (PV)La generación eléctrica se ha convertido en una importante fuente de energía limpia. Sin embargo, la generación fotovoltaica existe en dos formas principales: distribuida y centralizada. Estas dos formas difieren significativamente en varios aspectos y este artículo profundizará en sus distinciones.
I. Definición y escala
La generación fotovoltaica distribuida normalmente se refiere a sistemas fotovoltaicos de pequeña escala instalados en el extremo del usuario, con capacidades de generación que van desde unos pocos kilovatios hasta varios cientos de kilovatios. Estos sistemas están conectados directamente a la red de distribución y proporcionan energía a los usuarios. Por el contrario, la generación fotovoltaica centralizada implica grandes conjuntos fotovoltaicos instalados en plantas de energía a escala de servicios públicos, con capacidades de generación que suelen oscilar entre varios megavatios y cientos de megavatios. Estas plantas suelen transmitir energía a usuarios distantes a través de líneas de transmisión de alto voltaje.
II. Estructura del sistema y modo de operación
En términos de estructura del sistema, los sistemas de generación fotovoltaica distribuida suelen estar conectados directamente a la red de distribución, formando un sistema conectado a la red. En tales sistemas, la red de distribución no solo transmite energía eléctrica sino que también proporciona el soporte necesario para garantizar el funcionamiento estable de los sistemas fotovoltaicos. Por otra parte, las centrales fotovoltaicas centralizadas están conectadas a la red principal a través de líneas de transmisión de alto voltaje y su funcionamiento está sujeto al despacho y control de la red principal.
III. Impacto ambiental y uso de la tierra
En cuanto al impacto ambiental, la generación fotovoltaica distribuida suele tener una huella ambiental menor. Debido a su menor escala, requieren menores demandas de recursos terrestres y hídricos, sin necesidad de un gran desarrollo del terreno durante la instalación. Sin embargo, las plantas de energía fotovoltaica centralizadas, debido a su mayor escala, a menudo requieren un desarrollo extensivo de la tierra, lo que potencialmente conduce a la ocupación de los recursos de la tierra y a cambios en el entorno ecológico. Además, la construcción de plantas centralizadas puede implicar el uso de recursos hídricos y alteraciones de los paisajes naturales.
IV. Utilización y eficiencia de la energía
En términos de utilización y eficiencia energética, la generación fotovoltaica distribuida, al estar más cerca de los usuarios, puede adaptarse mejor a los cambios en la demanda de electricidad. Además, debido a su menor escala, el mantenimiento y la operación son relativamente simples, lo que resulta en una mayor eficiencia de conversión de energía. Por el contrario, las plantas de energía fotovoltaica centralizadas, debido a su mayor escala, requieren una transmisión y conversión de electricidad significativas, lo que puede provocar pérdidas de energía y una menor eficiencia. Además, los costos de construcción y mantenimiento de las plantas centralizadas suelen ser más altos, lo que requiere una inversión sustancial para lograr la viabilidad económica.
V. Escalabilidad y flexibilidad
La generación fotovoltaica distribuida demuestra importantes ventajas en escalabilidad y flexibilidad. Con avances tecnológicos y reducciones de costos, la escala y el rendimiento de los sistemas fotovoltaicos distribuidos se pueden ampliar y actualizar fácilmente. Además, estar ubicado en el extremo del usuario permite satisfacer de manera flexible las necesidades y preferencias energéticas específicas del usuario. En comparación, la construcción de plantas de energía fotovoltaica centralizadas requiere una inversión sustancial y una planificación a largo plazo, lo que resulta en una escalabilidad y flexibilidad relativamente menores.
VI. Viabilidad económica y retorno de la inversión
En términos de viabilidad económica, la generación fotovoltaica distribuida suele ofrecer un mayor retorno de la inversión. Con menores costos de construcción y operación debido a su menor escala, los sistemas distribuidos pueden recuperar rápidamente las inversiones. Además, los sistemas fotovoltaicos distribuidos pueden proporcionar a los usuarios seguridad del suministro eléctrico y beneficios de ahorro de energía, mejorando sus beneficios económicos. Por el contrario, los costos de construcción de las plantas de energía fotovoltaica centralizadas son más altos, lo que requiere una gran inversión de capital y una operación prolongada para lograr beneficios económicos.
VII. Apoyo a las políticas y entorno regulatorio
En el ámbito del apoyo político y el entorno regulatorio, la generación fotovoltaica distribuida está recibiendo cada vez más atención y apoyo. Muchos gobiernos han promulgado políticas relevantes que alientan el desarrollo de la energía fotovoltaica distribuida y ofrecen incentivos como exenciones fiscales, subsidios y apoyo crediticio. Además, algunos países han formulado leyes de energía distribuida y regulaciones de acceso a la red para promover el desarrollo de la energía fotovoltaica distribuida. En contraste, la construcción de plantas de energía fotovoltaica centralizadas a menudo enfrenta más restricciones políticas y regulatorias, como regulaciones sobre el uso de la tierra, evaluaciones ambientales y transmisión de energía.
En resumen, distribuido y centralizado.fotovoltaicageneración presentan diferencias significativas en varios aspectos. La generación fotovoltaica distribuida ofrece ventajas como pequeña escala, mínimo impacto ambiental, alta eficiencia de utilización de la energía, gran escalabilidad, viabilidad económica y apoyo político sustancial. Por el contrario, las plantas de energía fotovoltaica centralizadas presentan gran escala, mayor ocupación de recursos terrestres, impacto ambiental y limitaciones regulatorias.